A finales de mayo, un grupo de cinco personas voló a Hafnarsandur (Islandia) para plantar unos 20.000 árboles y esquejes en un terreno de 10 hectáreas. Para contrarrestar la catástrofe climática y fomentar la biodiversidad, es importante plantar bosques mixtos. Plantamos álamos, sauces, alisos, abetos de Sitka, abedules, pinos de Murray y serbales del vivero local. ¿Por qué volamos varios miles de kilómetros para plantar árboles? Nos lo preguntan una y otra vez. Nos gustaría mucho realizar más proyectos de reforestación en Alemania/Brandeburgo. Nuestra motivación es grande, pero desgraciadamente se ha visto frenada una y otra vez en los últimos dos años. Solicitar financiación es, como en cualquier autoridad alemana, una hazaña de proporciones increíbles. Nuestras solicitudes hasta ahora han sido rechazadas. Además, necesitamos zonas en las que se puedan plantar árboles. En Alemania, éstas son difíciles de conseguir o demasiado caras. En Islandia, nos dieron una gran superficie para plantar sin mucho esfuerzo. Al contrario que en Alemania, hay enormes zonas sin utilizar que pueden ser reforestadas. Como en Islandia no hay que construir vallas alrededor de las zonas plantadas, se ahorra mucho dinero y trabajo. Como en Islandia llueve mucho y a menudo, no es necesario regar los árboles. Tampoco es necesario cortar las malas hierbas que son demasiado altas, porque las zonas apenas están cubiertas de vegetación. El 90% de los árboles plantados crecerán. En Alemania, normalmente sólo el 50-60% lo consigue.
